El masaje tántrico es un tipo de masaje erótico que tiene el objeto de excitarse sexualmente (lo que sus seguidores —generalmente seguidores de alguna forma de tantra— llaman «despertar la energía kundalinī») en un ambiente íntimo y como forma de meditación en el propio cuerpo y en el de la pareja.
En el tantra, la espiritualidad se vive en el cuerpo y con conciencia de unicidad; por ello el masaje brinda la posibilidad de experienciar por la "vía rápida" un estado de placer individual con la ayuda del masajista. El cuerpo se considera sagrado, como un templo, una expresión suprema de la divinidad.
El masaje se utiliza como un recurso ritual tántrico y habitualmente forma parte de las actividades del neotantra.
El masaje tántrico no forma parte del cuerpo de conocimientos del tantra, sino que es un nombre inventado por occidentales para dar valor agregado a los masajes más convencionales diciendo que éste involucra el "masaje" de los genitales femeninos (ioni) y masculinos (lingam).
Al hablar de masaje tántrico nos referimos a una técnica totalmente enriquecedora y placentera. Es una forma distinta de sentir la sexualidad. Con este masaje descubrimos la capacidad de recibir placer inspirado en la filosofía hinduísta y mediante las caricias en las zonas eróticas se intenta lograr el equilibrio espiritual. Posee una finalidad más allá del placer: entra en lo más profundo del subconsciente llevando un rayo de esperanza a cada función específica, analizando las inquietudes y los deseos de la persona y eliminando el conflicto, la insatisfacción y la inquietud.
