El clásico acabó con derrota para los madridistas.
Todos sabíamos que esto podía pasar, sabíamos que el Barcelona, como ya de costumbre, se crecería en el Bernabéu.
El Santiago Bernabéu tampoco ayudó mucho a empujar al equipo, ya que solo se escuchaba a los Ultra Sur de vez en cuando.
Incluso a veces se escuchaba más a los seguidores del Barça que estuvieron allí
Cuesta aceptar estas derrotas pero no solo por ser un clásico, también porque siempre parece que el Real Madrid podría haber hecho más.
Al principio el Madrid salió enchufado como siempre, haciéndoles tocar en su campo, presionando mucho arriba, y de una de esas llegó el gol del Madrid.
A los 20 segundos de partido un Valdés muy nervioso hizo un pésimo pase que acabó en las botas de Di María y si al Madrid le das oportunidades así, no perdona.
Tras dos despejes malos de Busquets, el balón acabó en los pies de Benzema y remató a puerta haciendo el primero de la noche.
Al Barça le costó encontrarse pero lo logró y empezó a hacerse con el balón, y en el minuto 29 llegó el empate para los de Pep.
Así se llegó el descanso, con un partido que no tenía un dueño claro.
Ya en la segunda parte en el minuto 52, un disparo de Xavi sin mucho peligro golpeó en Marcelo que desvió la trayectoria del balón y Casillas no pudo hacer nada para evitar el 1 - 2.
Este gol hundió mentalmente al Madrid.
Mourinho empezó a mover el banquillo y dio paso al terreno de juego a Kaka y Khedira.
Después de los cambios, en una jugada Cristiano tuvo el empate, pero su remate se fue fuera por muy poco. Tras esta jugada llegaría la contra del Barça en la que Fabregas hizo el 1 - 3.
El Madrid intentó recortar distancias de todas las maneras pero no fue posible.
Una derrota que costó tres puntos, solo eso.
El Real Madrid y el Barcelona ahora mismo están empatados a puntos, evidentemente los de Pep están los primeros, por el resultado de ayer, pero de todas formas el Madrid ha jugado un partido menos y eso es una ventaja.
Basta con puntuar en Sevilla para que volvamos a ser líderes, ahora solo podemos esperar que la derrota no afecte moralmente a los jugadores.
Ahora toca pensar en el próximo partido que es contra la Ponferradina en Copa del Rey.
¡Hasta otra madridistas!
Todos sabíamos que esto podía pasar, sabíamos que el Barcelona, como ya de costumbre, se crecería en el Bernabéu.
El Santiago Bernabéu tampoco ayudó mucho a empujar al equipo, ya que solo se escuchaba a los Ultra Sur de vez en cuando.
Incluso a veces se escuchaba más a los seguidores del Barça que estuvieron allí
Cuesta aceptar estas derrotas pero no solo por ser un clásico, también porque siempre parece que el Real Madrid podría haber hecho más.
Al principio el Madrid salió enchufado como siempre, haciéndoles tocar en su campo, presionando mucho arriba, y de una de esas llegó el gol del Madrid.
A los 20 segundos de partido un Valdés muy nervioso hizo un pésimo pase que acabó en las botas de Di María y si al Madrid le das oportunidades así, no perdona.
Tras dos despejes malos de Busquets, el balón acabó en los pies de Benzema y remató a puerta haciendo el primero de la noche.
Al Barça le costó encontrarse pero lo logró y empezó a hacerse con el balón, y en el minuto 29 llegó el empate para los de Pep.
Así se llegó el descanso, con un partido que no tenía un dueño claro.
Ya en la segunda parte en el minuto 52, un disparo de Xavi sin mucho peligro golpeó en Marcelo que desvió la trayectoria del balón y Casillas no pudo hacer nada para evitar el 1 - 2.
Este gol hundió mentalmente al Madrid.
Mourinho empezó a mover el banquillo y dio paso al terreno de juego a Kaka y Khedira.
Después de los cambios, en una jugada Cristiano tuvo el empate, pero su remate se fue fuera por muy poco. Tras esta jugada llegaría la contra del Barça en la que Fabregas hizo el 1 - 3.
El Madrid intentó recortar distancias de todas las maneras pero no fue posible.
Una derrota que costó tres puntos, solo eso.
El Real Madrid y el Barcelona ahora mismo están empatados a puntos, evidentemente los de Pep están los primeros, por el resultado de ayer, pero de todas formas el Madrid ha jugado un partido menos y eso es una ventaja.
Basta con puntuar en Sevilla para que volvamos a ser líderes, ahora solo podemos esperar que la derrota no afecte moralmente a los jugadores.
Ahora toca pensar en el próximo partido que es contra la Ponferradina en Copa del Rey.
¡Hasta otra madridistas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario