Hola amig@s, en esta tarde desapacible, que invita a la lectura y a la reflexión, me gustaría comentar un libro que me regaló una amiga hace algún tiempo. Se llama "Las palabras que curan" y es una selección de frases y comentarios realizados por Álex Rovira. Después de leerlo varias veces he entresacado mis propios párrafos, aquellos que no quiero olvidar y que son un soporte fundamental en mi vida. Creo que cada uno de ellos pueden ayudarnos y sirven de reflexión para todos.
Las palabras son el vehículo de contacto de nuestra alma con la realidad, nos brindan además la posibilidad de significar toda experiencia. Son puente y camino para conocer y reconocer al ser próximo, descubrir sus matices, y cómo no, son también el vehículo de llegar a nosotros mismos.
La palabra es mitad de quien la pronuncia , mitad de quien la escucha. La palabra sorprende, conmueve, enternece y emociona. Pero lo más milagroso que sucede con las palabras, es que nos pueden curar. Con la palabra podemos hacer nuestra alquimia interior.
"Cuando mi sufrimiento se incrementó, pronto me di cuenta que había dos maneras con las que podía responder a la situación: reaccionar con amargura o transformar el sufrimiento en un fuerza creativa. Elegí esta última." MARTIN LUTHER KING
Muchas veces la vida carece completamente de sentido: en el dolor, el accidente, la injusticia, la infamia, el abuso, la violación, la enfermedad...No existen argumentos que justifiquen un sentido en la vida cuando el dolor es total. No los hay. Yo no los sé ver.
Pero no somos seres que vivimos en una isla sin relacionarnos con nadie y es en esos momentos cuando nos toca seguir andando gracias a la evocación de nuestra pareja, nuestros hijos, nuestros amigos, el afecto de las personas que nos quieren, que sin darnos cuenta, hacen que nuestro corazón tome aire, que respire y le dé una nueva oportunidad a la vida.
La felicidad es una manera de andar. No es un destino, es un síntoma que aparece al caminar y mientras que unos se dedican a perseguirla hay otros que la crean amando, ayudando, desarrollando su conciencia, procurando cuidar lo esencial o brindando pellizcos de alegría a quienes le rodean y...cuando lo hacen son felices. La felicidad no está en las cosas, sino que se pone en ellas, es un lenguaje que podemos desarrollar, porque depende de nosotros. Si observas una persona realmente feliz, la encontrarás construyendo un barco, escribiendo una sinfonía o un poema, plantando dalias o buscando huevos de dinosaurio en el desierto de Gobi. jaja.
"Le dijo al almendro: -Hermano, háblame de Dios
y el almendro se cubrió de flores."
NIKOS KAZANTZAKIS
Las palabras son el vehículo de contacto de nuestra alma con la realidad, nos brindan además la posibilidad de significar toda experiencia. Son puente y camino para conocer y reconocer al ser próximo, descubrir sus matices, y cómo no, son también el vehículo de llegar a nosotros mismos.
La palabra es mitad de quien la pronuncia , mitad de quien la escucha. La palabra sorprende, conmueve, enternece y emociona. Pero lo más milagroso que sucede con las palabras, es que nos pueden curar. Con la palabra podemos hacer nuestra alquimia interior.
"Cuando mi sufrimiento se incrementó, pronto me di cuenta que había dos maneras con las que podía responder a la situación: reaccionar con amargura o transformar el sufrimiento en un fuerza creativa. Elegí esta última." MARTIN LUTHER KING
Muchas veces la vida carece completamente de sentido: en el dolor, el accidente, la injusticia, la infamia, el abuso, la violación, la enfermedad...No existen argumentos que justifiquen un sentido en la vida cuando el dolor es total. No los hay. Yo no los sé ver.
Pero no somos seres que vivimos en una isla sin relacionarnos con nadie y es en esos momentos cuando nos toca seguir andando gracias a la evocación de nuestra pareja, nuestros hijos, nuestros amigos, el afecto de las personas que nos quieren, que sin darnos cuenta, hacen que nuestro corazón tome aire, que respire y le dé una nueva oportunidad a la vida.
La felicidad es una manera de andar. No es un destino, es un síntoma que aparece al caminar y mientras que unos se dedican a perseguirla hay otros que la crean amando, ayudando, desarrollando su conciencia, procurando cuidar lo esencial o brindando pellizcos de alegría a quienes le rodean y...cuando lo hacen son felices. La felicidad no está en las cosas, sino que se pone en ellas, es un lenguaje que podemos desarrollar, porque depende de nosotros. Si observas una persona realmente feliz, la encontrarás construyendo un barco, escribiendo una sinfonía o un poema, plantando dalias o buscando huevos de dinosaurio en el desierto de Gobi. jaja.
"Le dijo al almendro: -Hermano, háblame de Dios
y el almendro se cubrió de flores."
NIKOS KAZANTZAKIS
Es un placer conocerte RO, MAJO.
ResponderEliminarLa palabra es mitad de quien la pronuncia y mitad de quien la escucha. El placer también va a un 50%. jaja...
ResponderEliminar